¿Cuánto tardará la realidad en tocar a la puerta?

Por Ángel Verdugo

La entrega y posterior análisis del Paquete Económico sujeto a ¿los ajustes y cambios? que llevará a cabo el Congreso de la Unión, me lleva a emitir hoy algunas opiniones, no únicamente acerca del contenido y sus consecuencias.

Sé del riesgo que corro al adelantarme al trabajo de ambas cámaras; sin embargo, dado que las modificaciones a la Iniciativa de Ley de Ingresos 2020 y al Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación no requieren de una mayoría calificada, los legisladores de Morena —en el ejercicio soberano de su abyección y servilismo—, aprobarán ambos documentos junto con la Miscelánea Fiscal entregada al Congreso por parte del Ejecutivo federal.

Al revisar el contenido de los documentos que conforman el Paquete Económico 2020, la primera conclusión a la que se llega —al menos en mi caso—, es ésta: ¿cuánto tiempo le tomará a la realidad hacer su trabajo, y demostrarnos que el Rey va desnudo? Dado lo ahí contenido, ¿hay ingenuos que piensen, todavía hoy, que los intentos de esquivar la realidad económica y política del país tendrán éxito?

¿Quién en su sano juicio se atrevería a elogiar documentos cuyos supuestos básicos son, por decir lo menos, ilusorios? ¿Quién, desde la obligada objetividad y sensatez y la inocultable realidad de unas finanzas públicas endebles, elogiaría el Paquete Económico 2020?

Salvo los panegiristas oficiales y oficiosos (Los Glúteos Veloces), es imposible no estar preocupado ante lo enviado por el Ejecutivo al Congreso de la Unión.

Frente a lo visto y padecido hoy en México, convendría preguntarnos acerca del desenlace de varios procesos en algunos países de la región cuyos gobernantes pensaron, al igual que los nuestros hoy, que la realidad jamás se hará presente. Cuba, Argentina, Venezuela y Nicaragua son, para no mencionar otros casos, países donde los Castro, los Kirchner, Chávez y Maduro, y Ortega, jamás pensaron que la realidad se atrevería a desnudarlos y exhibirlos tal cual eran unos, y otros lo son hoy.

Cuatro países en la miseria, y con severos riesgos en cuanto a su viabilidad como tales, es lo que vemos en cada uno de ellos. ¿Acaso alguien se atrevería a afirmar que ningún otro país experimentará lo mismo que esos cuatro? ¿Están a salvo Bolivia, Ecuador y México, por ejemplo?

¿Qué elementos exhibiríamos para negar, que aquí podría darse algo parecido a los procesos de degradación vistos en esos cuatro países?

El Paquete Económico 2020 es la mejor prueba de la ilusión y alejamiento de la cruda realidad de este gobierno y, tanto quien lo encabeza como su equipo, se han negado a reconocerlo.

En el caso del primero, es entendible su negación a reconocer y aceptar la realidad; su desconocimiento de lo elemental del funcionamiento de las economías abiertas y los mercados y cuál es su papel, lo explica; de los otros, su oportunismo y nula honradez intelectual.

¿Qué excusa daríamos por la conducta de decenas de millones? ¿Querer vivir del erario la explicaría? ¿Así de fácil y simple? ¿Qué harán cuando la realidad los alcance y ya nada reciban? ¿Ya no aplaudirían, y tampoco votarían por Morena?. Información Excelsior.com.mx