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Los Juegos Panamericanos de Lima 2019 fueron para Kevin Berlín el parteaguas en su carrera, no solo por sus dos medallas de oro sino por una declaración que le achacaron como estandarte.
Con 18 años, el joven que consiguió una plaza para Tokio 2020 adquirió relevancia al aceptar que era “flojo” y “arriado”, pero no un mal atleta. Sin embargo, el atleta aclaró a Mediotiempo que dichas palabras fueron simplemente una reivindicación de sí mismo porque anteriores entrenadores lo relegaban con críticas de que no era disciplinado.
Su madre escuchó sus declaraciones en Lima hasta el día siguiente de la medalla y también se sorprendió porque nunca consideró flojo a su hijo.
“Mi mamá está algo furiosa porque después de 12 años de estar en clavados, desde los cinco años haciendo deporte, que yo dijera eso sí la molestó. Yo tenía sentimientos encontrados con el equipo pasado, fue lo que quise decir”, dijo en entrevista con Mediotiempo.
Berlín, quien es entrenado por Iván Bautista luego de algunos años bajo la tutela de Ma Jin, aseguró que esas palabras serán cambiadas por más logros. El joven clavadista no se conforma con su participación dorada en Panamericanos desde la Plataforma de 10m.
Él sueña con sus primeros Juegos Olímpicos y el vencer a Iván García, medallista olímpico en Londres 2012, le da la confianza de poder ganarse su lugar en Tokio 2020.
“Al principio no me lo creía, nunca pensé en todo lo que ha pasado. Queda mi sueño que es Tokio, voy a cambiar eso del flojo porque vienen más competencias”, agregó.
Y si hay alguien que sabe de victorias es él. A su temprana edad, además de sus medallas panamericanas puede presumir una en la Serie Mundial de Clavados de Montreal en abril pasado. Junto a Andrés Villarreal, Kevin se adjudicó el Bronce y respondió al ser la pareja elegida de “emergencia” tras la baja de la dupla de Randal Willars y Diego Balleza, quienes habían suplido a Germán Sánchez e Iván García por la lesión que sufrió Duva.
“Hay momentos en los que no se están dando las cosas, pero cuando se logran es una verdadera emoción para todos en la familia”, aseguró Leticia, lamadre del clavadista. “Una medalla me la dedicó, pero son de él”.
Kevin tendrá vacaciones antes de volver a Guadalajara para prepararse con miras a la próxima Copa del Mundo en Japón en abril del próximo año, y a la espera de la definición del selectivo que dará a conocer la conformación de la selección de clavados para Tokio 2020. Información Medio Tiempo