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Creer tener el control sobre un gigantesco cocodrilo, llevó a su entrenador a estar a punto de perder el brazo, en una demostración al público de una especie de zoológico en Phuket, Tailandia.
En un video que se ha difundido rápidamente en redes sociales, logrando más de 98 mil 500 reproducciones en YouTube, se puede ver al hombre jugar con las fauces de un cocodrilo.
De pronto, el reptil logra morder el brazo de su “entrenador” y realizar un giro que el animal usa para desmembrar a sus presas antes de ser devoradas.
Por fortuna el hombre logró hacer un giro inesperado para el enorme animal, y pronto volvió a abrir su hocico para liberar a quien le recordó que con la naturaleza no se juega.
A pesar de lo grotesco de las imágenes, Anusak Salangam, salió bien librado del impredecible ataque en el que solo sufrió cortes menores y arañazos. Información Tv Notas
