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Cifras sobre mortalidad del Inegi reflejan que además de grupos de menor edad, las poblaciones de adultos mayores son una de las que más aumentos ha tenido en cuanto a casos de suicidios.
Los suicidios en México han ido al alza en los últimos años: sólo del 2017 al 2021 aumentaron los casos en 28 por ciento. Una de las poblaciones en las que se ha visto un mayor impacto, además de los jóvenes, son los adultos mayores que representan poco más del 10 por ciento de la población del país.
Pareciera no ser un tema tan frecuente, incluso no es común encontrar este tipo de noticias en medios de comunicación. Pero es algo que ocurre.
Los motivos pueden ser distintos, por ejemplo, en octubre del año pasado un medio local reportó en Mérida, Yucatán, el caso de un hombre de aproximadamente 80 años que se habría disparado en calles del centro de la ciudad; en ese momento se habló de posibles problemas personales.
Unos meses antes en Progreso, en ese mismo estado, se reportó el caso de otro hombre de 74 años, quien supuestamente se suicidó por ahorcamiento. De acuerdo con medios locales, sus vecinos dijeron saber que esa persona pasaba por una depresión tras el aislamiento que dejó la pandemia.
En otros reportes locales se han visto a adultos mayores que se suicidaron por temor al deterioro por una enfermedad, o porque fueron víctimas de un fraude y perdieron sus ahorros. Son diferentes los casos que se presentan.
Después de las personas de 25 a 29 años, el grupo de población de 70 a 74 años fue quien tuvo un mayor aumento de casos de suicidios del 2017 al 2021, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En 2017 hubo 107 casos para este grupo de edad, mientras que el año pasado la cifra subió a 151. Es un aumento de 41 por ciento, el segundo más alto para un grupo de edad.
Dentro del rango de adultos mayores, le siguieron las personas de 60 a 64 años. Los casos de suicidios para este grupo de edad incrementaron en 31 por ciento al pasar de 186 a 245 en cinco años. Luego estuvo el grupo de 65 a 69 años con un aumento del 20 por ciento.
Causas de suicidios en adultos mayores
El problema de suicidios en poblaciones de adultos mayores no es algo nuevo, ni que se disparó a raíz de la pandemia, pues es una situación que puede estar motivada por soledad, enfermedades, depresión, entre otros factores, según señaló Laura Barrientos, médica psiquiatra y académica de la Facultad de Medicina de la UNAM.
“Hay algunos factores que con la pandemia incrementaron, pero en otros casos este tipo de situaciones vienen de tiempo atrás en esta población”, señaló.
Entre las situaciones que pueden llevar a ello, explicó, están por ejemplo los sentimientos que dejan enfermedades crónicas o con las que pierden autonomía y requieren del cuidado de alguien más. Aunado a lo que pueden sentir por esto, hay ocasiones en las que se puede sumar la falta de una familia o red de apoyo que vea por estas personas.
“Al sentirse ellos abandonados, solos, es una de las situaciones que favorece la desesperanza en esta población”, señaló.
En cuanto al COVID, la académica recordó que en los inicios de la pandemia la enfermedad era como “una moneda al aire”, en cuanto a no saber los efectos o secuelas que se podían tener.
Por ello, hubo también pacientes que se suicidaron por temor a no sufrir o enfrentarse a situaciones adversas de salud. Esto incluyó a diferentes grupos de la población, no sólo adultos mayores que percibieron este temor.
Entre otros motivos, se pueden encontrar personas que lo hacen para generar culpa a un conocido o conocida o porque creen que así castigarán a alguien; también están quienes ven en ello una manera en que los demás dejen de sufrir por dejar de estar presentes en su vida o no tener problemas con los que viven.
Recomendaciones para prevenir suicidios de adultos mayores
Una forma de prevenir suicidios en poblaciones de adultos mayores es visibilizar el problema de manera informada, señaló Laura Barrientos. Esto puede ser a través de instituciones gubernamentales, medios de comunicación o especialistas.
Esto servirá para detectar y tratar oportunamente a quienes pueden tener factores de riesgo, cuestión que incluye a personas con trastornos mentales, consumo de sustancias o quienes sufren de aislamiento social, enfermedades crónicas o viudez, un episodio que puede marcar su vida.
Otra forma de prevención, recomendó la académica, es reducir el acceso a medios letales si se considera que la persona tiene pensamientos suicidas. Ya sea de situaciones o herramientas que puedan usarse para este fin. También está la cuestión de favorecer una red de apoyo que pueden formar familiares, amistades, vecinos o compañeros de trabajo, entre otros, así como el plantear pensamientos a futuro.
“De pronto hay personas que alcanzan unas metas de vida, pero no se prepararon para la jubilación, o cuando los hijos se retiran de casa. Es importante favorecer que cada persona se haga responsable de sí misma y de su vida”, explicó.
Finalmente, consideró importante el desarrollo de políticas públicas que mejoren las condiciones de estos grupos de la población, como del trabajo de la sociedad para integrarlas en el día a día.
Destacó la importancia de esta prevención, pues las afectaciones no sólo llegan para la persona que se suicidó, sino para gente cercana.
“Hay muchas personas que lamentablemente a causa del suicidio de personas cercanas, quedan con ideas de culpa, duelos difíciles de resolver. Con la pandemia se incrementó este fenómeno en el que los duelos son más patológicos”, detalló.
En caso de detectar que adultos mayores pueden presentar pensamientos suicidas o riesgos de suicidios, es importante buscar a especialistas como psiquiatras o psicogeriatras que se especializan en este grupo de población. También se pueden sumar a este tratamiento psicólogos, tanatólogos, internistas y geriatras para tener un tratamiento integral y atender mejor cada caso.
¿Dónde puedo buscar ayuda ante riesgos de suicidios?
Como antes se mencionó, lo más importante es acudir con especialistas o profesionales de la salud mental que puedan dar un diagnóstico y tratamiento oportuno; evita hacer un autodiagnóstico.
Hay varias alternativas públicas y gratuitas donde puedes buscar ayuda, aquí te presentamos algunas opciones:
Locatel: 55-5658-1111
UNAM: 55-5025 0855
Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la CDMX: 55-5533-5533
Sistema Nacional de Apoyo, Consejo Psicológico e Intervención en Crisis por Teléfono: 55-5259-8121
Si lo consideras adecuado, acércate con gente de tu círculo de confianza que puedan ayudarte a acceder con especialistas en salud mental, profesionales que serán los más adecuados para determinar cuál será el mejor tratamiento para tratar un trastorno mental o riesgo de suicidios.
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