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La Liga Mx vive momentos de contraste; por un lado, hay cierta apertura internacional que ha permitido que figuras de la talla de Ronaldinho, hace algunos años, y ahora, James Rodríguez y Sergio Ramos hayan volteado, como otrora súper estrellas del fútbol internacional, hacia el torneo mexicano, decidiendo formar parte de equipos en un abanico amplio de lo que puede ofrecer la liga: desde Querétaro, que ahora pasa por severos problemas de presupuesto, hasta Monterrey, equipo que puede desembolsar cantidades millonarias de dinero para armar un cuadro; pasando por León, un club que no se encuentra en ninguno de los dos extremos de la cadena económica de la liga, pero que es capaz de mostrarse como un equipo con seriedad y un plan atractivo para jugadores como el colombiano Rodríguez. Pero, por otro lado, existe una severa crisis en el fútbol mexicano, la falta de competencia, sobre todo a partir de la desaparición del ascenso y descenso, vuelve a la liga un producto que se va perdiendo en el desinterés de la afición que, teniendo opciones futbolísticas mucho más atractivas a la mano, prefiere consumir lo que se ofrece fuera de nuestro país.
Javier Tebas, presidente de La Liga de España, parece tener muy claro el panorama; de acuerdo a lo que ha dicho, la liga mexicana podría ser una de las más importantes del mundo, el propio directivo español la situaría entre la cinco o seis primeras en el en mundo, pero ‘le falta organización’, algo que se puede notar desde la falta de acuerdos para las transmisiones de partidos, ya sean de los mismos equipos de la liga, hasta los derechos de la Selección Mexicana, pasando, incluso por la calendarización de los torneos profesionales. En la Liga Mx Femenil, por ejemplo, se empezaron a jugar los partidos correspondientes a cuartos de final, pero, en una decisión poco acertada, en un acto casi de canibalización los dos partidos que se jugaban el martes, Atlas vs Pachuca y Juárez enfrentando a América, se empalmaron con la semifinal de Copa de Campeones CONCACAF, perdiendo el brillo y la atención que necesita la liga femenil.
Hace algunos meses ya, dentro de la junta de dueños, se manejó la posibilidad de incluir un fondo de inversión externo que serviría para inyectar capital, externo al de los propios clubes, con el propósito de facilitar la unificación en cuestiones que iban desde la venta de boletos, equipaciones generales, publicidad y derechos transmisión; tratando de meter a todos los clubes en el mismo saco, cuando no se puede comparar, por ejemplo, el boletaje, en precio y cantidades, de equipos tan dispares como Atlético de San Luis y Monterrey o Tigres. La idea del fondo de inversión se vino abajo ante la oposición de un sector de la junta de dueños quienes argumentan que dicho capital va en contra del patrimonio que un equipo de fútbol significa para tantas familias.
El fútbol mexicano ha sido tratado como un producto, que unos pocos comercian y manosean, en lugar de tratarlo como una industria capaz de generar beneficios económicos y deportivos a todo el entorno. Una de los principales características del balompié nacional radica en tener a la Federación Mexicana de Fútbol controlando a la Liga Mx, es decir, una depende de la otra mientras que en las mayores ligas del mundo estas dos entidades están separadas.Recientemente, se ha hablado mucho sobre la multipropiedad que existe en el fútbol mexicano, pero hay temas que no están sobre la mesa y que también pesan sobre el desarrollo, de maneras más profesionales y organizadas, de éste deporte en México. Las decisiones que se toman en la junta de dueños son determinantes, y con poco consenso, y muchas veces han resultado en detrimento de la propia competencia y el espectáculo. Que los intereses económicos de algunos dueños pasen sobre el interés común, tiene como resultado el momento ambivalente que vive en este momento nuestro fútbol. Información Radio Fórmula